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lunes, 23 de diciembre de 2013

Excesos con la comida y la bebida: principales enemigos en Navidad


Ya ha llegado la Navidad un año más y, como suele ser habitual, siempre la celebramos comiendo y bebiendo; y, claro, alguna vez comemos "un poquito de más". Pero este poquito nos suele producir ciertos problemas de salud que, aún siendo leves, nos resultan bastante molestos. Los problemas más comunes son empachos, digestiones pesadas, estreñimiento, acidez de estómago, diarreas y dolor de cabeza. Todos estos problemas derivan de los excesos con la comida, la bebida y el tabaco, por lo que podemos evitarlo siguiendo unos pequeños consejos.
El día antes y el día después de una comida copiosa, es conveniente hacer comidas frugales y ayudarse con infusiones y plantas digestivas y depurativas.
Otra consecuencia de estas fiestas es la tan repetida frase "tengo que ponerme a dieta" y la clave para no repetirla este año (y evitar recurrir a "dietas milagro") es compensar los excesos y aprender a disfrutar de la gastronomía sin dejar de lado los hábitos saludables. Una medida eficiente es introducir los alimentos menos calóricos (verduras, frutas, pescados y carnes magras) y hacerlo con preparaciones y presentaciones más elaboradas y menos cotidianas, que los conviertan en platos especiales y atractivos.



También tenemos unos pequeños trucos para intentar evitar todos estos problemas

  • Come despacio y mastica bien los alimentos: para comer menos y evitar los "atracones"
  • No abuses de las carnes grasas y los fiambres: los menos grasos son pavo, jamón york
  • Consume verduras y alimentos ricos en fibra
  • No dejes de tomar fruta: se puede preparar una fuente con fruta para postre y/o sobremesa, pero también se puede tomar como entrante o ensalada
  • No piques entre horas: recuerda no picar mientras cocinas
  • Sustituye las salsas industriales (con muchas grasas y calorías) por salsas caseras preparadas con zumo de limón, yogur desnatado o vinagretas
  • Toma infusiones tras las comidas (manzanilla, anis) para una mejor digestión
  • Come de todo, pero con moderación: si quieres comer de todo lo que hay en la mesa, hazlo en un plato pequeño y no repitas
  • No abuses del alcohol

Pero también hay unos pequeños consejos para compensar los posibles excesos
  • Desayuno frugal: no olvidarse nunca del desayuno, aunque estos días sea más suave, ya que ayuda a recuperar fuerzas y sentarnos a comer posteriormente con menos ansiedad
  • Utiliza alimentos depurativos: alivian la pesadez de estómago, la sensación de hinchazón o dolor de cabeza. Los alimentos que tonifican el hígado son los que tienen sabor amargo (escarola, endibias, alcachofas, cardo, berenjena, infusiones de diente de león y cardo mariano) y los que activan los riñones son verduras y frutas como apio, espárragos, borraja, manzana o pera
  • Toma alimentos ricos en fibra: ayudan a evacuar y aliviar el vientre hinchado
  • Come una ensalada de entrante: las verduras crudas contienen enzimas, que ayudan a una mejor digestión
  • Un yogur al día también favorece la digestión
  • Camina una hora al día, como mínimo: también ayuda a la digestión y a que las calorías no se acumulen. Si no puedes caminar durante una hora seguida, puedes repartirlo en dos caminatas de media hora, un rato por la mañana y otro por la tarde
  • Es buena idea repartir las sobras de las comidas con amigos y familiares, ello te evitará comer de más los días siguientes

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